Cumpleaños, Navidad, nacimientos, aniversarios. Las excusas para regalar son variadas, ya que regalar es una manera de demostrar afecto. Pero elegir el obsequio no resulta siempre una empresa sencilla, incluso si se tiene claro a quién, por qué, cuándo y dónde se hará el obsequio y con qué sentido.
Las fiestas de fin de año imponen por costumbre que las personas sientan que deben dar a sus seres queridos un presente que aquellos a su vez aguardan como un recordatorio del interés que se tiene por ellos, y cuya omisión sería mal recibida.
Hay quienes simplifican el asunto, regalando siempre algo parecido. Otros, haciendo gala de imaginación, buscan un presente original; otros uno utilitario. Hay quienes se preocupan más por establecer una relación coste-beneficio, buscando el artículo más económico que cumpla su función decentemente.
Pero para muchas personas el regalo es una elección original que demuestra que se preocupan por buscar algo tan especial como el propio destinatario. Lo entienden cómo un mensaje y una metáfora, que expresa sentimientos, emociones y propósitos, como una proyección material de sí mismos hacia otro. Su elección revela su personalidad e intenciones.
Si quiere estar entre quienes descubren lo que la gente desea y disfrutan con la elección de un regalo, en lugar de seguir en la lista de los que nunca aciertan y pasan un martirio a la hora de acudir a la tienda para adquirir un presente, siga los consejos de los mejores expertos en psicología y habilidades sociales:
SECRETOS PARA DAR EN EL CLAVO
Tendrás muchas más probabilidades de acertar con el obsequio que eliges si sigues estos consejos: .
- Procura ser original en los regalos.
- Siente que un regalo refleja la personalidad de quien lo efectúa.
-Consulta a los familiares y/o amigos de la persona obsequiada sobre lo que le gusta.
-Intenta captar en conversaciones aparentemente casuales aquello que le puede apetecer a la persona a la que le va a regalar.
-Dedica el tiempo necesario para seleccionar el regalo adecuado.
-Al comprar, ten en cuenta el tipo de relación que te une a la persona.
-Entiende que los regalos son una forma de expresar cariño.
-Evita comprar en las primeras tiendas donde entras.
PENSAR EN EL OTRO
Elegir un obsequio es un asunto espinoso, pero la mejor forma de encararlo es pensar en los gustos de la persona a la que se quiere agasajar. Hay que tener presentes sus hobbies, lo que le hace falta ó lo que no necesita pero adora, desde la cocina, la decoración o la ropa, hasta los tratamientos de belleza, la lectura o la música.
Facilita mucho el tino a la hora de obsequiar el hecho de que la persona a quien se va a hacer un regalo tenga aficiones o gustos definidos: libros, utensilios prácticos, obras de arte, discos, objetos para coleccionar o practicar su deporte preferido. Eso sí, lo que debe tener claro es que el obsequio no debe presentar ninguna obligación posterior para quien lo recibe.
ANTE LA DUDA: PREGUNTAR
Hay gente muy difícil de conformar. En esos casos, lo mejor es preguntarle qué quiere, dónde lo vio y si se lo quiere probar antes. Cuando nos de el visto bueno, lo único que hay que hacer es ir a comprarlo.
También hay individuos que esperan que los demás sepan lo que quieren y se desilusionan con el resultado. Se desconciertan porque la gente que mejor las conoce las desconoces al hacerle regalos de Navidad, pero no dicen lo que quieren, al menos, no de un modo que los demás comprendan, se mantienen reservadas acerca de sus deseos o necesidades o prefieren que decidan por ellos.
En vez de interpretar sus indirectas o leerles la mente, pregúntales hasta obtener respuesta
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